La princesa Diana fue icónica por muchos motivos: Se enfrentó a la OTAN y a los gobiernos británico y estadounidense con su campaña para erradicar las minas antipersonales, marcó un hito en la lucha contra el estigma sobre las personas con SIDA y rompió los códigos de etiqueta impuestos por la corona británica. 

Fue libre en su estilo. Amaba las joyas y usaba muchas al tiempo, iba de negro a eventos oficiales, se anudaba el jersey y usaba vaqueros. Cada atuendo era revolucionario y desafiante: ¿Qué vestido hubiese elegido para el funeral de la Reina Isabel II? Aquí van mis dos opciones:

El “vestido de la venganza”

Se trata del vestido negro de seda sin hombros de Christina Stambolian (1994) con el que Diana asistió a la fiesta benéfica de Vanity Fair celebrada en Kensington, Londres. Con este vestido, Lady Di rompió todos los protocolos de vestimenta de la casa real británica.

El vestido “Fiebre de sábado por la noche” 

En 1985 la princesa Diana asistió a una cena en la Casa Blanca con un vestido de terciopelo azul del diseñador Victor Edelstein. Le llamo el vestido “Fiebre de sábado por la noche” porque ¡adivinen con quién bailó esa noche! Sí, con John Travolta.

Nunca sabremos cuál usaría o sí hubiese asistido al funeral. Lo que sí queda claro, una vez más, es que la Princesa Diana fue un antes y un después en la historia de la corona. Y en la de nuestros corazones. 

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