Los mensajes poderosos son aquellos que logran grandes cambios. Eso ocurrió con Paula.
A Paula Sarmiento le ocurrió lo que a muchos recién graduados de arte les pasa. El día que deciden salir a la calle en busca de trabajo, la primera pregunta es: ¿Cuál es tu cuerpo de trabajo? A lo que ella sagazmente respondió: “La obra de arte soy yo”.
Ese poderoso mensaje se empezó a plasmar en las calles y avisos decorativos de muchos lugares importantes de Miami.
Sin embargo, Paula, artista plástica, encontró en la industria de la moda un espacio para llevar su mensaje: “No todos pueden comprar una obra de arte”, dice, “y quiero enviar este mensaje por el mundo a través de objetos al alcance de cualquier persona”, y así fue como surgió la idea de llevarlo en prendas de vestir simples, hermosas y atemporales.
“La obra de soy yo” se ha convertido en un mantra y en una puerta: “El espíritu del movimiento fue la obra de arte, pero también ha sido una oportunidad abierta para muchos artistas que quieren enviar sus mensajes a través de sus creaciones”.
En 2021 y junto a Americanino, Paula diseñó chaquetas y camisetas cosidas por las mujeres tule o cuna, una tribu indígena que vive en el corazón de Necoclí. Además, cada prenda suya es, por supuesto, una obra de arte: los overoles, por ejemplo, son prendas únicas, pues es ella quien pinta cada uno de forma diferente.
Durante cuatro años consecutivos ‘La obra de arte soy yo’ ha estado presente en Art Basel, y se ha convertido en un movimiento que le da vida a un estampado tan popular que lo leemos en todas partes.
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